TECNOLOGÍAS EMERGENTES TAREA 27/09/22- ERICK SALAZAR GÓMEZ

 

Medicina digital

Como bien se sabe, la pandemia de la COVID-19 ha sido motivo para la creación de diversos métodos de atención a la salud mental y física del ser humano, y una de los nuevas tecnologías que se ha implementado es la medicina digital. Conocido como medicamentos digitales, estos softwares pueden mejorar la atención médica tradicional y ayudar a los pacientes cuando el acceso a la atención médica es limitado.

Muchas ayudas de detección se basan en dispositivos móviles para registrar características como las voces, expresiones faciales, el sueño, entre otros; luego aplican inteligencia artificial para señalar la posible aparición de una enfermedad. Existen ayudas de detección de muchas formas, tales como: relojes inteligentes con sensores que pueden medir el ritmo cardiaco, píldoras ingeribles con sensor para detectar cosas como ADN canceroso, temperatura corporal; y así mismo, se sigue trabajando en más herramientas de detección. Desde luego, estas ayudas no reemplazarán a un médico en corto plazo, pero pueden ser socios útiles para el seguimiento de inquietudes.

Un ejemplo de las aplicaciones terapéuticas es reSET, la primera terapia digital recetada que obtuvo la aprobación de la FDA en 2018, como un complemento a la atención profesional de la salud. Asimismo, Luminopía, una empresa emergente de salud infantil, ha diseñado una aplicación de VR para tratar la ambliopía, una alternativa a un parche en el ojo. Sin embargo, no todas las aplicaciones de bienestar califican como medicamentos digitales, puesto que, la mayoría debe demostrar su seguridad y eficacia en ensayos clínicos y obtener su aprobación.

En conclusión, la sociedad debe avanzar con cuidado hacia el futuro de la medicina digital, sometiendo las herramientas a pruebas rigurosas, que protejan la privacidad y se integren sin problemas a los flujos de trabajo de los médicos. Con todo esto aplicado, el fenotipado digital ahorraría costos de atención médica, personalizar la atención al paciente y con los patrones que surjan, proporcionarán a los investigadores con ideas novedosas para desarrollar hábitos más saludables y prevenir enfermedades.